Para reflexionar...

Y así después de esperar tanto, un día como cualquier otro decidí triunfar. Decidí no esperar a las oportunidades sino yo mismo buscarlas. Decidí ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución. Decidí ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis. Decidí ver cada noche como un misterio a resolver. Decidí ver cada día como una nueva oportunidad de ser feliz. Aquel día descubrí que mi único rival no eran más que mis propias debilidades, y que en éstas, está la única y mejor forma de superarnos. Aquel día dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganar. Descubrí que no era yo el mejor y que quizás nunca lo fui, me dejó de importar quién ganara o perdiera. Ahora me importa simplemente saberme mejor que ayer. Aprendí que lo difícil no es llegar a la cima, sino dejar de subir. Aprendí que el mejor triunfo que puedo tener, es tener el derecho de llamar a alguien "Amigo". Descubrí que el amor es más que un simple estado de enamoramiento, "el amor es una filosofía de vida". Aquel día dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente. Aprendí que de nada sirve ser luz si no vas a iluminar el camino de los demás. Aquel día decidí cambiar tantas cosas. Aquel día aprendí que los sueños son solamente para hacerse realidad, desde aquel día ya no duermo para descansar. Ahora simplemente duermo para soñar.


miércoles, 8 de enero de 2014

(66)Principio del final -parte 2º-


Hola Holaaaa
Nuevo Capi!! XD Espero les guste. Por favor comenten y háganme saber que aun siguen ahí. 
Las quiero y nunca las olvido! 
BESOTE! 






Mi único propósito es destrozar a esos malditos italianos y conseguir así mi venganza. Esa es la razón por la que las quiero a ustedes de mi lado: mis dos piezas principales en este ajedrez- y dio terminada la conversación acuclillando su cuerpo y mostrando esa sonrisa que tan bien conocía, una que había sido protagonista de miles de mis pesadillas en los últimos años. 
-Bien, acabemos de una vez-
Contaba con el hecho de poder anticipar sus movimientos leyendo su mente, pero me tomo totalmente por sorpresa. Arremetió contra mí sin ni siquiera pensarlo, solo lo dominaba el instinto de quien sabe cuántos años de experiencia.
Pero yo había pasado mucho tiempo en la última semana perfeccionándome en el arte de atacar y defenderme. Había sincronizado mis dones a la perfección con mis movimientos, y lo tome por sorpresa cuando vio que empezaba a golpearlo en sus puntos ciegos con todo lo que tenía a mi alcance. Este don de controlar las cosas a mí alrededor caía la mar de bien en esta situación.
Pero yo no era la única con trucos bajo la manga, por descontado que no.
Mi ventaja cobre la pelea se vio suprimida por el hecho de que él tuviera el mismo don que aquella garrapata que me encontré por primera vez aquí, en los acantilados. Recordé como había sido pelear con aquel neófito que podía controlar las rocas a su alrededor, y la ventaja que tenía allí arriba en los acantilados, rodeados de aquel material.
Arremetí una, dos, tres veces sin poder llegar a tocarle, ya que se escudaba en esas estúpidas rocas (del tamaño de un auto pequeño) que extraía del suelo. Obviamente que esas estúpidas piedritas no eran rival para mí, pero en cuanto las hacia pedazos de un golpe el se escondía de mi vista y tenía que concentrarme en su mente otra vez para saber de done vendría su próximo ataque.
Por supuesto que apareció a mis espaldas, como todo gran cobarde.
Estuvo a punto de tomarme por el cuello pero por surte era un poco más veloz que él, además de que tuve la pequeña ventaja de poder escuchar lo que pensaba. Esta vez se había descuidado y había hecho evidente su movimiento.
Salte hacia delante unos cuantos metros adentrándome en el bosque esta vez. No contraataque rápidamente y el tampoco. Nos quedamos mirándonos por unos cuantos segundos, estudiándonos con la mirada.
Mi respiración se había incrementado. Respiraba agitadamente y mi corazón iba a mil. La adrenalina corría por mis venas proporcionándole energía a todos mis músculos. Me obligue a calmarme un poco, porque el taladrante sonido de mi corazón impedía que me concentrara y lo último que quería era eso, porque no estaba luchando con cualquier garrapata.
Ben seguía inmóvil contemplándome a la espera de que hiciera mi siguiente movimiento. O eso fue lo que pensé.
De repente, y como por arte de magia, sus pensamientos desaparecieron. Pestañe de pura sorpresa porque no era el momento para que mi mente me jugara esta mala pasada.
-¿Qué diablos…? – en ese instante Ben se movió hacia mí y logro mandarme volando contra el árbol más cercano. Antes de que me pudiera levantar ya lo tenía al frente de mí. Me tomo por mi pelo y me levanto, pero logre darle una patada que hizo que volara de nuevo dentro del claro.
El se estaba riendo mientras se levantaba.
-¿Qué sucede Claire? ¿Te eh tomado por sorpresa?- lo miré sin comprender. Obligue a mi cerebro a entrar en su mente pero algo me lo estaba impidiendo. Era como tratar de entrar en la cabeza de Bella…
-Guardas más trucos aun por lo que veo…- Ben se descostillo de la risa y yo trate de ponerme en pie otra vez. Al hacerlo algo en mi costado derecho comenzó a punzar de dolor.
Genial, una costilla rota. No era tan indestructible como siempre había creído.
-¿Es que nunca te lo había dicho? ¿No fuiste capaz de leerme la mente hace un rato? Yo fui el creador de esos neófitos, mis poderes son los que la mayoría están usando y cuando ya no los necesitan más, esos poderes vuelven a su dueño original. ¿No es genial?- ¿estaba jugando conmigo? ¿Acaso no era suficiente con todo lo que él podía hacer que iba a tener que soportar aun más? Era algo ilógico que un monstruo así existiera. Me pregunte por un segundo si esos tales Vulturis eran realmente tan fuertes como para poder desafiarlo. Tal vez, ello eran la misma clase de monstruos que Ben.

Ahora comenzaba a dudar de si podría hacerlo sola. El dolor en mi costado se incremento, afirmándome que no iba a salir de esta sin unos cuantos “rasguños”. O tal vez no saldría de esta.
Descarte por completo ese pensamiento de mi cabeza y me obligue a pensar en algo.
Y fue entonces cuando escuche una mente, que corría velozmente hacia aquí.


SARA
-El destino no es lo mismo que el futuro querida. Eso deberías de saberlo-  argg. Esta Ashley me ponía los pelos de punta.  Emanaba burla por cada poro de su piel.
-Explícame la diferencia entonces, rubia- su carcajada sonó como a cascabeles repiqueteando haciendo eco alrededor.
-Que hostil de tu parte. Veras, como tú sabrás el futuro cambia conforme cambian los pensamientos de las personas. Pero el destino no, ya que se pueden tomar muchos caminos para llegar a un mismo lugar. Sé cómo terminará esto Sara, ya lo eh visto- su sonrisa se incremento y su cuerpo se tenso aprontándose para lo que vendría luego.
Ataque sin pensármelo dos veces. Como había dicho, ella no era muy ducha en la pelea y tomaría eso a mi favor. Su ataque fue de frente como yo esperaba, por lo que seguí las instrucciones de Jasper y la ataque por los costados.  Pero ella era rápida.
¿Cómo diablos podía moverse tan rápido? Creería que igualaba la velocidad de Edward, si es que eso era posible. Ella se movía una milésima de segundo antes de que mis manos lograran atraparla. Pero yo tenía más práctica en la lucha que ella, por lo que a pesar de que me costó un poco, al final pude tomar uno de sus brazos. La lance de una patada y ella voló por los aires unos buenos cuantos metros mientras gritaba de dolor.
-Upss. Me eh quedado con el- le dije, mientras dejaba caer al piso su brazo son sus dedos aun retorciéndose. Ashley reacciono como cualquier neófito lo hubiera hecho. Me gruño y no tardo mucho en volver a levantarse y caer al piso de nuevo. Esta vez con un poco menos de esa melena rubia que tenia.
-¿Sabes? Te sienta bien ese corte- me reí por su expresión: tenía sus ojos abiertos como platos y me exhibía los dientes.
Por un momento pensé que tal vez era pura cháchara eso del destino, porque se podía ver claramente quien estaba en desventaja aquí. No necesitaba ver el futuro para saberlo.
Ashley se paro y arremetió… por última vez.
La esquive y a causa de la falta de su brazo no pudo darse la vuelta lo bastante rápido antes de que tomara su otro brazo y lo arrancara de un suave tirón.  Lo lance por ahí y tome a una Ashley adolorida por el cuello. La tenía arrodillada, con mi boca a centímetros de su cuello. Sería fácil acabar con ella ahora.
-Quiero que me respondas una cosa- ella se carcajeo, una risa nerviosa ya que sabía que estaba en clara desventaja- ¿Qué ha sido todo eso del destino? Por más que lo pienso si de verdad pudieras hacer lo que dices, nunca en la vida podrías haber aceptado venir aquí, si sabias que ibas a terminar así- esperé a que respondiera. Ella rio otra vez, esta vez de un modo sombrío.
-Nunca mentí con respecto a mi don. Todo lo que dije es verdad… en parte. Por alguna razón no puedo verlas a ustedes, igual que a esos perros. Claire no ha podido ver mucho por lo que parece. Pensé que me descubriría en cuanto entrara en mi cabeza- sopese sus palabras antes de contestar.  Parecía la pura verdad.
-Lamento de verdad esto. No me puedo creer que de verdad estés involucrada Ashley. Lo lamento de veras- no le di tiempo a que pudiera contestar.
Tome mi encendedor de mi bolsillo y empecé a formar una pila con las partes que había dejado por ahí.  Ardió rápido y un humo oscuro y empalagoso empezó a ascender. Quede absorta mirando la columna de humo que ascendía cuando pude ver como se desarrollaba otra escena, algo futuro. Aquello que más temía se volvió totalmente claro a mis ojos. No era Quil el que se interponía entre Claire y Ben…
Un grito ahogado salió de entre mis labios

Salí pitando en la dirección en la que se había ido Claire. Seguí su olor y llegados a cierto punto fui capaz de sentir también el rastro de Seth que había seguido el rastro de mi amiga minutos antes.
Corrí lo más rápido que mis piernas me dejaron esperando que eso fuera suficiente para llegar a tiempo. Algunas lágrimas brotaron de mis ojos al darme cuenta de que se encontraban mas lejos de lo que pensaba y que tal vez no llegaría antes de que… No, no… no.
Suponía un poco mas de alivio el saber que Seth estaría a salvo. No sé qué sería de mí si Claire no lo hubiera apartado del camino de Ben. A estas alturas no concebía una vida sin él, era algo insoportable incluso de pensar. Pero Claire… No tenía porque haberse arriesgado tanto… Pero se lo agradecería por toda la eternidad, y no encontraría jamás un modo de compensarla por esto.
Obligue a mis piernas ir más rápido conforme llegaba al claro. Podía escuchar la respiración entrecortada de Seth que gimoteaba en el piso intentando levantarse. Y un corazón trabajando lentamente dirigiéndose a su último latido.
No pude escuchar a nadie más. Me sentí aliviada al tiempo que veía una columna de humo espesa que se levantaba entre los arboles del bosque. Todo se había acabado por fin.
Me sentí fatal por no haber ayudado. Maldije a Ashley en mi fuero interno por haber aparecido.
Cando llegue al claro Seth ya comenzaba a respirar normalmente, levanto su cabeza del suelo y me dedico una mirada torturada llena de pena y culpa. Yo me acerque a su lado y pose mi mano sobre su cabeza.
-Está bien. Ya se acabo- le dije, en un susurro casi inaudible. Lo deje a mis espaldas y me encamine hacia Claire, tirada al borde del lado más alejado del claro. Respiraba con dificultad. Tendría más de una costilla rota pensé.
-¿Tan mal me veo?- me dijo cuando me arrodille a su lado. Intento mostrarme una sonrisa pero termino siendo una mueca de dolor.
-Lo siento por no haber llegado antes…Debía haber terminado con ella más rápido… yo debía de estar aquí…-
-Shh, calla. No te has perdido de mucho la verdad…- y una carcajada termino en un gemido que hizo que mi pena se intensificara aun más.
-Te estaré eternamente agradecida, Claire… hermana. Y jamás podre compensarte por lo que has hecho por mí- las lagrimas empezaron a brotar de mis ojos con más intensidad esta vez.
Sentí como Seth se paraba y caminaba a paso lento hasta los arboles. Cojeaba levemente.
-No fue nada Sara. Sé que tú hubieras hecho lo mismo por mí… Pero ahora debes prometerme algo…- su voz era cada vez más baja y tuve que acercarme a pesar de estar a su lado- Dile a Quil que lo amo con todo mi ser… No dejes que se crea nada de lo que vea o lo que digan… Tienes que hacer que te escuche solo a ti. No quiero que él sufra más de la cuenta innecesariamente…- yo solo asentí, entendiendo todo lo que me había encargado.
Su corazón dio un vuelco y empezó a latir a trompicones.
Yo tome su mano, sabiendo el calvario por que tendría que pasar ahora.
-Todo se ha acabado al fin…- dijo, antes de que su ultimo latido hiciera eco en mis oídos. 


10 comentarios:

  1. Nena!!! Cuando vas a poner el otro cap????

    ResponderEliminar
  2. me a encantdo sube ponto el otro porfiis

    ResponderEliminar
  3. se murio Claire???? OMG sube el otro por fa o ahi acaba???? ...... contesta lo mas pronto que puedas plisssss

    ResponderEliminar
  4. omg!!!!!!!!! me muero por saber k pasa sube otro capi pronto porfis

    ResponderEliminar
  5. omg!! no puedo creer lo que paso.
    no!!!! Claire no puede morir o acaso ben la convirtió en vampiro antes de que terminaran con él?
    sube el siguiente capitulo pronto plis

    ResponderEliminar
  6. hola,me encanta tu blog y la la gran idea de hacer una historia de quil seria genial que hubiera una pero desde el punto de vista de sara en fin..me encanta y espero el prox capitulo...al igual llevo un blog y me gustaría que lo vieses http://noche-oscura-sara.blogspot.com/ SALUDOS :)

    ResponderEliminar
  7. Subila pronto por favor!!!!!!!!!!!!!

    ResponderEliminar

MI BLOG SE ALIMENTA DE TUS COMENTARIOS
¡COMENTA PLEASE!

Calendario