Para reflexionar...
Y así después de esperar tanto, un día como cualquier otro decidí triunfar. Decidí no esperar a las oportunidades sino yo mismo buscarlas. Decidí ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución. Decidí ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis. Decidí ver cada noche como un misterio a resolver. Decidí ver cada día como una nueva oportunidad de ser feliz. Aquel día descubrí que mi único rival no eran más que mis propias debilidades, y que en éstas, está la única y mejor forma de superarnos. Aquel día dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganar. Descubrí que no era yo el mejor y que quizás nunca lo fui, me dejó de importar quién ganara o perdiera. Ahora me importa simplemente saberme mejor que ayer. Aprendí que lo difícil no es llegar a la cima, sino dejar de subir. Aprendí que el mejor triunfo que puedo tener, es tener el derecho de llamar a alguien "Amigo". Descubrí que el amor es más que un simple estado de enamoramiento, "el amor es una filosofía de vida". Aquel día dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente. Aprendí que de nada sirve ser luz si no vas a iluminar el camino de los demás. Aquel día decidí cambiar tantas cosas. Aquel día aprendí que los sueños son solamente para hacerse realidad, desde aquel día ya no duermo para descansar. Ahora simplemente duermo para soñar.
sábado, 29 de octubre de 2011
(32) Esta por comenzar
Luego de la película (que nunca supe de que se trataba) le llego el turno al karaoke.
Se me hizo raro que una manada entera de lobos no halla venido a ver lo que pasaba, porque la verdad era, que cualquiera pensaría que nos estaban torturando.
Bueno en todo caso, si eso llegaba a pasar, la culpa sería de Emily, porque el canto era algo que se me daba bien, aunque no me gustaba alardear sobre eso.
Y como muy bien sabia mi tía, la guitarra era mi fuerte, por lo que tuve que complacer a 4 impacientes espectadoras con algún que otro solo de guitarra y un par de canciones escritas por mi.
Luego de una muy extensa guerra de almohadas, el reloj marco las 5:30 de la madrugada. Todas caímos exhaustas. Yo fui a mi cuarto y saque el colchón de mi cama, lo mismo hizo mi tía, y los colocamos en la sala. Yo me rendí en el sofá, mientras que ellas descansaron en la cama improvisada que habiamos hecho.
Esa noche mantuve unas cuantas conversaciones con Nessie, en las cuales principalmente le pregunte sobre su naturaleza de semi-vampira y sobre su familia.
Me mostró de que se trataba su don, y me sorprendí mucho al saber que su padre, Edward Cullen, podía leer la mente.
No me sorprendió el hecho de que tuviera un don, ya que sabia que eso era posible, lo que si lo hizo, fue saber que no podía leer mi mente. Le pregunte si tenia alguna hipótesis de porque no funcionaba conmigo y ella me dijo que no estaba segura, pero que podía ser alguna clase de escudo, algo parecido a lo que podía hacer su madre cuando era humana.
No dormí muy bien. El hecho de que mi mente estuviera escudada saco a flote muchas preguntas, algunas mas preocupantes que otras.
Por la mañana o mejor dicho las tarde, me desperté en mi cuarto. Eran las 13:30 cuando me dí una ducha. Era sábado y muchos turistas entraban y salían de la Push.
El día estaba totalmente encapotado, y algo frío, pero los chicos me dijeron que el domingo estaría mejor, que haría calor.
Y el presagio se cumplió.
Al otro día la playa estaba repleta de turistas gracias al día raramente caluroso. Algunos de los chicos se fueron a alardear un poco a los acantilados, tirándose una y otra vez ante la vista horrorizada de muchas personas.
Lo que hizo que ese día fuera el mas divertido desde que había llegado, fue el hecho de que una mujer de unos 40 años de edad allá llamado a la ambulancia al ver que uno de los chicos se tiraba y no volvía a la superficie.
Mientras Sam y Jacob daban explicaciones a la mujer de que ellos estaban bien, Nessie y yo nos retorcíamos de la risa.
Era asombroso lo rápido que nos habíamos amigado. Por desgracia tuve que recibir unos cuantos "te lo dije" por aceptar que ella era una muy buena persona a pesar de todo.
Luego de eso, pase el resto del día con Jake, Nessie y Quil. Los invite a cenar a casa y la pasamos estupendamente. Reímos toda la noche junto con Emily y Sam.
Luego de que Jake y Nessie se fueran, Quil se quedo conmigo un poco mas...y cuando desperté por la mañana, ya era Lunes.
Ya se había cumplido la semana, y eso era razón suficiente para amargarme el día.
Tome una ducha para calmarme un poco, pero como era de esperarse, esta no funciono.
Emily aun seguía dormida, y yo la envidié. Me hubiera encantado poder soñar y salir de la pesadilla en la que estaba.
me prepara el desayuno y lo comí lentamente, procurando no pensar en nada mientras lo hacia.
Cuando Emily despertó yo ya había terminada de lavar los platos y vasos que habían quedado de la cena de la noche anterior.
Estaba segura de saber que era lo que ella había visto en mi.
Estaba parada frente a la ventana de la cocina, con la frente arrugada por la preocupación de no saber si todo había terminado ya, de no saber si todos volverían a salvo y sin un rasguño.
La incertidumbre me quemaba por dentro, y mi tía pudo apreciar eso y mucho mas.
-Debes confiar e ellos, saben lo que hacen y están preparados para todo- ella trató de tranquilizarme, pero ya era demasiado tarde porque los nervios habían germinado en mi.
-Nadie esta preparado para todo, si fuera así, Ben hubiera muerto la primera vez que piso estas tierras- Emily sabia que yo tenía razón, pero aun así, no pude hacer torcer ni un poco su confianza.
Miraba hacia afuera sin ver nada exactamente. Estaba pensando en lo que Nessie me había dicho, que o era un escudo.
Le había dado muchas vueltas a ese asunto. En los días en los que fui presa y cazador al mismo tiempo, siempre me pregunte porque me había salvado de los dones de tantos vampiros, y ahora lo sabia.
Pero aun tenía muchas preguntas sin respuesta y que supiera una de ellas no aminoraba la carga.
lunes, 24 de octubre de 2011
(31) El comienzo de una amistad
-Em, prácticamente ya tiene 17 años, es normal que piense en eso- contra ataco Kim, mientras yo las miraba totalmente incrédula.
-Es verdad Kim, pero mientras viva en esta casa, y piense en esas cosas, mejor que se valla consiguiendo una habitación en otra parte- dijo Emily, mirándome a mi, muy seriamente por cierto.
Kim y Rachel, que había estado callada hasta entonces, comenzaron a reír.
Yo, por mi parte, las fulmine con la mirada a todas.
-!Oigan ya vasta¡ ¿Se dan cuenta de que hablan de mi intimidad !estando yo aquí presente¡?- estaba muy irritada.
!Hablaban de algo privado entre Quil y yo como si fuera un asunto cotidiano, algo de todos los días¡.
En ese momento pude ver por la ventana, las luces de un coche.
Suspire.
La noche recién estaba empezando.
Kim y Emily fueron a recibir a nuestros invitados mientras que Rachel y yo, nos quedamos dentro.
Rach me palmeo el hombro animándome, y yo le dedique la mejor sonrisa que pude.
Mire por la puerta que estaba abierta y vi la silueta de un hombre de espaldas a mi.
Trate de agudizar mi oído para escuchar su conversación.
-¿Estas segura?- reconocí esa voz como la de Edward Cullen.
-Papá, estoy segura. Según Alice todo saldrá bien.- decía Reneesme.
-Alice no puede ver nada sobre ti, solo son simples presentimientos.- no entendí nada de lo que había dicho, pero me di cuenta de que esa tal Alice si era una Cullen. Como siempre había tenido razón.
-A ella le confió mi vida, papá. Y tu no te preocupes, estaré bien. Ademas, ¿que podría pasarme?-
Nunca se sabe dijo una voz en mi cabeza.
Edward miro en mi dirección. Afuera estaba oscuro, pero pude verle el rostro gracias a la luz que había dentro de la casa.
Sus ojos dorados brillaban como los de un gato.
-Nunca se sabe, hija- dijo, para luego darse la vuelta de nuevo.
Yo aparte la vista de la puerta y deje de escuchar.
Me puse a pensar en algo que no tuviera nada que ver con lo que me esperaba dentro de pocos minutos.
Concentre mi mente específicamente en esa voz que había escuchado hacia instantes. Fue algo desconcertante, porque usualmente escucharía mi voz en mi cabeza, pero no fue así.
Fue como haber tenido a Edward en mi mente.
-¡Hola Rachel!- su voz me hizo volver a la realidad.
Reneesme saludo muy calidamente a Rach, y ahora era mi turno.
Ella guardo distancia, algo que le agradecí infinitamente.
-Hola Claire, es un gusto verte de nuevo.- maldita sea. Yo no me merecía toda esa amabilidad.
-Hola Renees...Nessie- sabia que lo mejor era empezar bien, y creo que emplear su sobrenombre por la cual todo el mundo la llamaba era una muy buena idea.
Ella me sonrió y yo no pude evitar pensar en Ben cuando vi sus brillantes dientes blancos.
-Oye, Ness, tal vez quisieras cambiarte. Puedes pasar a mi cuarto si quieres- le dijo Emily.
-Si. enseguida lo hago, pero antes...Emi, Alice me a dado esto.- dijo ella sacando algo de su bolso que no pude llegar a ver.
-Creo que habrá Karaoke, chicas- nos dijo Kim mostrándonos un micrófono.
-!Yo seré la primera¡- dijo mi tía teniendo de repente 15 años menos.
-No es por ofender tía, pero quiero seguir conservando mis oídos- ella me saco la lengua, visiblemente ofendida.
Luego de que Reneesme se cambiara, decidimos que sería empezar mirando una peli.
Elegimos algo cómico, porque las películas de terror ya no nos asustaban.
Ellas 4 se sentaron en la alfombra mientras que yo me acomode en el sofá.
Luego de 20 minutos de película, me aburrí, los chistes eran realmente malos.
-Oigan, ¿quieren que traiga mas comida?- les pregunte, porque las dos bandejas de comida que Kim había traído se habían ido volando.
-Por favor- decía Rachel mientras me alcanzaba las bandejas vacías.
Me encamine hacia la cocina, metí las bandejas bajo un chorro de agua y las comencé a lavar para utilizarlas nuevamente.
De repente sentí los pasos de alguien as detrás de mi.
Me di la vuelta para ver a Reneesme con 3 vasos en sus manos.
La película estaba algo aburrida ¿no crees?- me dijo mientras dejaba los vasos en la mesa.
-Si, demasiado diría yo- me di la vuelta y seguí con mis cosas.
Creo que has lavado esa bandeja por mas de 5 minutos- me sobresalte un poco al escuchar su voz tan cerca de mi. Me compuse y me di cuenta de que ella tenia razón.
Reneesme me sonrió y me alcanzo uno de los vasos que ella había traído para que lo lavara.
Le di la bandeja que había lavado y la comenzó a secar.
Suspire para mi misma. Debía ser ahora, debía disculparme por mi comportamiento hacia ella las pocas veces que nos habíamos visto.
Obviamente, los nervios llegaron, como si estuviera a punto de pararme sobre un escenario y hablar frente a miles de personas.
-Yo..bueno, quería disculparme...-
-No tienes porque hacerlo. Con todo por lo que has pasado, encuentro natural tu aberración hacia mi familia.- la mire por unos segundos sin comprender nada. Ella me había dicho que no tenía nada de lo que disculparme luego de tratarla como a un cubo de hielo la noche de la fiesta, o de haberla ignorado olímpicamente hacia unos días. Si yo hubiera estado en su lugar, ni siquiera pisaría la Push.
No sabía que decirle. La verdad esperaba otro tipo de reacción, que me hiciera las cosas un poquito mas difíciles.
Pero por un lado, me sentí aliviada. La tormenta ya había pasado y no había sido ni la mitad de fuerte de lo que pensaba.
Sin ni siquiera pensarlo, le sonreí y acto seguido puse los ojos en blancos, lo que hizo que ella riera. El eco de su riza se pareció al de las campanas.
Yo le pase el vaso que había lavado para que lo secara.
-Oye Claire ¿Crees que Ben demorara mucho en dar la cara otra vez?- al mirar su rostro me di cuenta de que fruncía las cejas en señal de preocupación.
-Bueno, es muy probable- la miraba de reojo de vez en cuando, ya que no me animaba a levantar la vista de lo que tenia entre las manos para mirarla a la cara.- Querrá probar que tan fuerte somos y no lo va a hacer en persona. Tal vez unos meses.- dentro de unos meses yo ya no estaría aquí, y tendría que apañarme con todo este asunto yo sola. Pero tendría que sacarme de encima a toda una manada de lobos antes.
-¿Nos probara? ¿De que forma?- Nessie interrumpió mis pensamientos con mas preguntas.
Después de tanto tiempo sin publicar, aquí les traigo un nuevo capi de esta historia.
Creo que se merecen una muy buena explicación por mi parte de porque estuve ausente tanto tiempo. Bueno lo que paso es que en las ultimas dos semanas eh tenido tantas cosas para hacer que no había tenido ni un ratito libre para publicar. Entre los escritos y un par de asuntos que e tenido que solucionar, estas semanas han sido un caos.
Mil perdones, por hacerlas esperar tanto.
Espero comenten¡¡¡
Gracias por visitarme...
Buena semana.