-Sara, tu madre ya esta en casa. Deberías ir para que no se preocupe- me dijo Alice con una sonrisa, como queriendo darme ánimos.
-Esta bien...- le respondí sin muchas ganas la verdad, porque quería salir corriendo pero no en dirección a mi casa.
-Solo ve a que sepa que estas bien. Yo volveré a la Push a ver como están las cosas. Por cualquier noticia te llamaré ¿si? Y cuando quieras puedes ir a casa- me dijo Claire sabiendo en donde quería estar en ese momento.
Yo le asentí y me dirigí a casa. No estaba muy lejos por lo que llegué en unos 5 minutos.
Y cuando me detuve en la entrada de casa esta se veía mas... Viva.
Antes no había mas que unas camas viejas y una mesa en el comedor. Pero ahora mamá había puesto hasta macetas afuera de la casa con grandes plantas llenas de flores y cortinas en las ventanas. Aunque aun había cosas en el camión de mudanza.
-¡Sara!- me llamo mi madre al verme llegar. Ella me abrazó con una gran sonrisa en el rostro.
Y yo trate de engañarla lo mejor posible. No quería que se preocupara por nada hoy. Fue un viaje muy largo y ya era tarde. No sabía con exactitud en que hora estaba viviendo pero parecían como las 9 o 10 de la noche. No se como se había pasado tan rápido el tiempo.
-¿Como ha estado el viaje? ¿Largo verdad?- le pregunte, tratando de mejorar mi voz, porque estaba algo ronca de tanto llorar.
-Si, muy largo la verdad. Pero valió la pena. Los alrededores de Forks son bellísimos- si te gustan los verdes alienigenas Agregué para mis adentros.
-Si, es cierto, pero es muy parecido a Alaska. E igual de frió- le respondí.
Luego de arreglar algunas cosas, nos sentamos en el sillón que habíamos colocado en la sala.
Estaba nerviosa y quería ir a la casa de Claire rápido.
-¿Y bien? ¿Como ha quedado todo?- pregunto mi madre con una sonrisa.
-Creo que hemos echo un excelente trabajo. Y nos merecemos un descanso ¿no?- luego de haber dicho esto nos dirigimos a la cocina donde mamá preparo algo para que pudiéramos comer.
Eran las 12 de la noche o quizás mas cuando ella se fue a dormir a su recién adquirido cuarto.
Y yo me aseguré de que ella estaba dormida para poder salir de la casa.
Justo cuando salía por la ventana de mi cuarto mi celular vibró. Era un mensaje de Claire.
<<Él esta bien... Carslie dijo que gran parte de su cuerpo estaba quebrado pero que se recuperaría en algunos días...¿Tu vendrás a casa?>>
Saber que estaba bien fue un alivio, pero estaría postrado en una cama quien sabe cuantos días.
Me apresuré en llegar a casa de Claire. Creo que nunca en mi vida había corrido tan deprisa.
-¿Tan apurada estabas como para no contestar?- me dijo Claire al verme llegar a su casa.
-Esto fue culpa mía... ¿Te imaginas acaso como me siento?- le respondí pero ella no contesto nada.
Dio media vuelta y comenzó a correr a velocidad vampirica.
-¿Esta en su casa?- esa era la pregunta mas estúpida que pude haber echo. Era obvio que estaría en su casa. Solo que yo no quería ir.
-Si. Tal vez Carslie siga allí. Estaba colocando los huesos en su lugar cuando me fui...- una mueca paso por el rostro de Claire al decir eso.
-¿Que pasa?- le pregunte. Sabia que algo me ocultaba.
Y justo en ese momento un grito rompió la oscuridad de la noche.
-Creo que Carslie aun no se ah ido- dijo mi amiga mirando a la casa de donde provenían esos gritos.
Afuera de la casa se encontraban Jake, Embry y Quil. Ellos eran sus mejores amigos, no entendía que hacían ahí afuera.
-¿Tu soportarías verme en una cama, con todos mis huesos quebrados y gritando?- me dijo Claire al escuchar mis pensamientos.
No, claro que no....
Claire se dirigió a Quil el cual la recibió encantado en sus brazos.
-Hola...¿Como estas?- dijo Embry.
Yo no sabía como contestarle, ya que era la culpable de todo esto.
Y un nuevo grito mas desgarrador que los últimos hizo que una lagrima se me escapara.
-¿Esto contesta a tu pregunta?- le dije y el solo asintió.
Los gritos siguieron algunos minutos mas, pero cuando realmente terminaron Carslie salio de la casa.
Yo no hice mas que mirarlo porque con mi cara decía todo lo que tenía que preguntar.
-Esta bien. Pero no les aseguro por cuantos días estará en cama. Muchos de sus huesos estaban rotos: sus brazos, hombros y una pierna. Pero no será mas de una semana y algunos días como mucho. Algunos eran huesos grandes y por lo visto no sanan tan rápido- una semana y algunos días.
Era menos de lo que esperaba, por suerte.
-¿Esta despierto?- le pregunte.
-Si. Puedes pasar si lo deseas.- miré a Claire que estaba a mi lado y ella me sonrió y asintió en señal de aprobación.
-Esta bien- entré a la casa y en ella estaba Leah que me miraba no de una forma muy buena, y a su lado estaba su madre. Pareciera como si hubiera estado llorando por horas. De echo debió de ser así.
Llegué a su cuarto como si lo hubiera sabido toda mi vida. Abrí la puerta y eche un vistazo.
-Pasa- me dijo con una voz ronca. Yo suspire y entre.
Estaba en su cama, cubierto por una frazada, y con varios yesos. Uno en su mano y brazo derecho y otro en su pierna izquierda. Tenía su mano izquierda vendada al igual que su hombro.
-¿Tan mal estoy?- me dijo intentando moverse.
-¿Que haces? ¡Te descolocaras los huesos de nuevo idiota!- le dije y me acerque a su cama para recostarlo de nuevo.
-No tendrías que haber venido- me dijo una vez que se relajo en su cama.
-Tenía que hacerlo. Tenía que pedirte disculpas- le dije entre algunas lagrimas que me vencieron.
Yo me había arrodillado en el piso cerca de el y pude darme cuanta de que respiraba entre cortada mente ¿Carslie me había ocultado algo mas?
Me di cuanta de que estaba tapado hasta el cuello y eso se me hizo raro. Ellos no sentían frió.
Tomé la frazada de su cuello y intente ver que ocultaba debajo pero el tomo mi mano con su mano izquierda, aunque se notaba que le dolía.
-¿Es una costilla verdad? - debía de ser eso.
El simplemente suspiro.
-No debiste haber venido- murmuro para si mismo.
-Ya te dije que quería disculparme, esto no hubiera pasado si....¿Porque te metiste?-
-¿Si que?- me pregunto.
-Si no te hubiera conocido.... Nada de esto hubiera pasado. Tu seguirías tu vida y yo la mía .. ¿Porque tenias que fijarte en mi?- dije esa ultima pregunta mas para mi que para el que ahora me estaba mirando de una forma rara, como si no entendiera de lo que estaba hablando.
-Seguiría una vida totalmente vacía ¿sabes? Ademas, ¿tu crees que yo elegí esto? ¿Crees que lo hice apropósito? Estas cosas pasan Sara... No puedes detenerlas- suspire de la pura rabia que tenía.
Ambos nos quedamos en silencio por un rato. Entre su respiración y mis lagrimas pasaron los minutos.
-Sigo insistiendo en que no deberías haber venido- una risita salio sin querer de mi boca.
-Repites eso como un loro. Ya te dije porque estoy aquí...- el busco mis ojos con la mirada.
Pero yo no podía mirarlo sin que mas lagrimas cayeran.
- ¿Porque lloras? Si estoy seguro que esto me duele mas a mi que a ti- no quería responder a esa pregunta, después de todo había repetido la respuesta un millón de veces.
-¿Aun quieres saber porque me metí a salvarte?- me dijo, cambiando la pregunta al ver que no le respondí la anterior.
-Si, en parte vine por eso- el rió sin ganas, puesto que le dolía al respirar.
-Creí que venias a disculparte- me enjuague las lagrimas y lo fulmine con la mirada.
-Idiota- murmure y el volvió a reír.
-Bueno, lo hice simplemente porque te había prometido que haría que vuelvas a creer... Quería ganarte de alguna forma. Ademas, si te pasaba algo y yo no era capaz de ayudarte, nunca me lo hubiera perdonado- el realmente se había tomado esto enserio.
-No funcionará el truco de el héroe conmigo. Ya lo han intentado- le dije para que no volviese a intentarlo.
-Bueno, el truco funciono, porque después de todo estas aquí- cerré mis ojos y respire hondo dos veces. No quería desquitarme con el y matarlo a golpes.
-Si, tienes razón, no debí de haber venido- me paré de donde estaba pero el me tomo de la mano.
-No, por favor espera. No era mi intención que te enojaras. Lo siento, enserio- no sabía si su cara de dolor era porque su mano vendada le dolía o porque no quería que me fuera, pero fuera cual fuera la razón hizo que me quedara allí.
Al otro día desperté en mi habitación, pero no tenía ni idea de como había llegado allí.
Di una vuelta en la cama y me tropecé con una hoja de papel encime de la cama.
<Te has quedado dormida en lo de Seth. Te eh dejado en tu casa sin que tu madre se diera cuenta.
Ah, y pasaré por ti a las 11. Tenemos que hablar. Claire>
Doble su carta a la mitad y la dejé sobre mi escritorio. Ni iba a pensar en nada por ahora, no quería arruinar la mañana, por lo que paso ayer. Después de todo, Seth estaba bien, mi mamá a salvo y Claire también. Nada mas importaba.
Baje las escaleras luego de vestirme y arreglarme un poco, pues tenia unas ojeras muy marcadas, y no quería que mi madre se pusiera a pensar porque no había dormido bien.
-Buen día, ma. ¿Como has pasado tu primera noche aquí?- le pregunte con una gran sonrisa.
Ella me correspondió con otra al tiempo que me respondía.
-La verdad es que estaba muy cansada y dormí como un bebe toda la noche. Ni siquiera se si eh soñado algo.- yo me eche a reír. Era muy típico de ella levantarse por la mañana y contar sus absurdos sueños. Se nota que estaba cansada como para no haber tenido ninguno.
-¿Y tu has descansado?- me pregunto.
-Aja- le dije sin darle demasiada importancia al tema.
-Claire mando un mensaje a mi celular diciendo que pasaría por acá a las 11. ¿Te importa que salga un rato hoy?- le pregunte, sabiendo cual sería su respuesta.
-Claro que no. Tu sal todo lo que quieras, son vacaciones ¿recuerdas?- le sonreí y le di un beso en la mejilla antes de ir a mi cuarto.
-¡Gracias mamá!- le grite por e camino.
Cuando estuve en mi cuarto volví a leer la nota de Claire. Al final me pico la curiosidad y cerré los ojos concentrándome en lo que vendría.
Iríamos a la casa Cullen. Eso era algo que me esperaba. Después de todo habían muchas cosa de que hablar.
Traté de concentrarme un poco mas, ya que hacia mucho tiempo que no usaba este don para espiar a Ben. Pero no conseguí nada. Cada vez que trataba de ver algo sobre él, siempre aparecía Ashlye en medio. Y no entendía porque.
Dejé de tratar de ver algo sobre esa sanguijuela para concentrarme en mi futuro.
Y esta vez algo apareció. Unos ojos marrones que conocía muy bien aparecieron.
Esos ojos que me habían atormentado en mis sueños allá en Alaska ahora aparecían en mi futuro. Y sabía de quien eran.
-Sara, ¡Claire esta aquí!- mi madre corto el hilo de mis pensamientos.
Salí de mi cuarto y vi a Claire y a mi madre muy sonrientes. Después de todo, hace mucho que no se veían.
-Hola Sara. ¿Como estas?- sabía que su pregunta tenía un doble sentido.
-Bien, eh dormido bastante bien hoy- Claire sonrió viendo que decía la verdad, después de todo escuchaba mi mente.
-Veo que te ha gustado el regalo ¿eh Claire?- dijo mi madre observando por la ventana el brillante Mercedes Benz que estaba estacionado al frente de casa.
-Si, gracias. Supe que tu y mis padres intervinieron en ello. No tendrían que haberse molestado- dijo mi amiga sentándose en una de las cillas de la cocina.
-No te preocupes, te lo mereces. Ademas, recibimos ayuda de una familia amiga. No sabía que conocías a los Cullen, Claire.- me pillo con la guardia baja que mi madre los mencionara.
-Si, los conozco desde hace poco, pero me eh echo muy amiga de ellos, ademas, allá en la Push, para algunos son como familia- cuando dijo eso, los únicos que me pasaron por la cabeza fueron Jake y Seth. Aunque los demás no los vieran como enemigos (bueno, algunos pocos) no todos los consideraban familia exactamente.
-¿Enserio? Tenía entendido que los Cullen no eran bienvenidos allí.- no entendía como mamá sabía todo eso.
-Eso era hace mucho tiempo.- dijo Claire.
-¿Y si nos vamos?- le pregunte a Claire. Estaba algo impaciente la verdad.
-Esta bien. Otro día vendré a charlar, señora Jones- mamá sonrió y asintió.
Claire y yo salimos de la casa y subimos a su coche.
-¿Que ha sido todo eso?- Claire me sonrió.
-Te sorprenderías la cantidad de experiencias vividas por tu madre.
-¿Te has metido en su cabeza? No has visto nada sobre...- deje la frase inconclusa, ya que no sabía si esa persona podría considerarse mi padre después de abandonarnos.
-No. Esta muy escondido en su sub-consiente. No creo llegar hasta ahí. Es como si tuviera una barrera para esos tipos de recuerdos. Ni siquiera ella puede llegar hasta allí consciente mente.
No dije nada después de eso. Y Claire tampoco quiso sacarme de mi abstracción.
Yo no entendía a mi madre. Todos estos años tratando de sacarle algo sobre mi padre, y ella siempre respondía lo mismo: “No estoy segura hija” o simplemente cambiaba de tema.
¿Como no podía estar segura del hombre con el que...? Bueno, no quería pensar en eso tampoco, porque eso implicaba detenerme a analizar que clase de persona era mi madre en aquella época.
Ella siempre me había mantenido a ralla con respecto a hacer preguntas de su pasado, era como si no quisiera recordar. Pero el pasado es parte de uno y hay que aprender a vivir con el, después de todo, esos recuerdos te hacen lo que eres hoy.
-Llegamos- dijo mi amiga, estacionando al frente de la mansión Cullen.
Bajamos del auto y antes de llegar a la puerta esta ya estaba abierta. En la puerta nos recibió el doctor Cullen con una amplia sonrisa.
-Hola, Carslie- saludamos Claire y yo a dueto.
-Sean bienvenidas. Pasen, las estábamos esperando- Claire paso de primera y yo pisando le los talones.
-¡Claire, Sara¡- exclamo Nessie al vernos. Nos saludo a ambas con un cálido abraso.
-No entiendo como es que llegaste a odiar a esta criatura. ¡Pero si es una santa!- Claire rió entre dientes, mientras que Nessie puso los ojos en blanco.
-Hola, Claire, Sara- Esme nos saludo igual que Nessie. Ella era realmente muy amable con todo el mundo.
-Hola, Esme. Y hola a todos.- Claire se sentó en un el sofá al lado de Nessie.
Edward y Bella estaban junto a su hija. Esme y Carslie se sentaron en un sofá mas pequeño. Alice y Jasper estaban allí, de pie. Alice parecía cansada, algo imposible para un vampiro. Jasper parecía sujetarla para que no cayera.
Verla a ella me recordar ese día cuando me esforcé tanto que termine exhausta y con un dolor de cabeza terrible. Tal vez ella le estuviera pasando lo mismo.
Emmet y Rosalie bajaron las escaleras y se situaron carca de Carslie y Esme. Estaban todos los Cullen reunidos allí.
-Jake y Sam están por llegar- anuncio Edward, ya que debió de escuchar sus mentes cerca de la casa.
Traté de agudizar el oído para poder escuchar algo.
El sonido de 8 patas caminando ahí afuera y dos corazones latiendo rápidamente me dio la pauta de que ya estaban cerca.
Nadie se levanto a abrir la puerta, pues todos estaban absortos en sus pensamientos.
Me pregunto en que estarán pensando.
-Hola. Perdón por llegar tarde- dijo Jake entrando en la sala y sacando de sus pensamientos a todo el mundo.
Nessie se paró de donde estaba para saludar a Jake con un dulce beso que Jake correspondió con gusto. Bella se paro también para saludarlo. Edward parecía esta controlando algo, y ni siquiera se paro para saludar a Jake.
-Suegro- dijo Jacob al pasar al lado de Edward. Este le dedico una mirada envenenada que hizo que Jake riera.
Sam se quedo parado a una distancia prudente del resto. El no se sentía a gusto allí.
-Hola Sam- le salude desde el sofá. Este solo asintió a la distancia.
-Muy bien, ya estamos todos aquí. Así que... Claire ¿para que nos has citado?- comenzó Carslie.
Así que Claire había echo esto.
-Quiero analizar todo lo que ha ocurrido ayer. Hay algunas cosas que aun no me cierran- yo asentí dándole la razón.
-Empezando por el numero de neófitos que destruimos. Eran demasiados para que un solo vampiro pueda controlarlos, y ni siquiera causaron alboroto en las ciudades ni nada. ¿Como pudo tan cantidad de neófitos pasar tan desapercibidos?- dije yo tratando de que alguien me ayudara a comprender.
-Esa pregunta ya esta resuelta- dijo Edward mirando a Claire.
-Si. Ayer cuando esperábamos su llegada en la frontera algunos neófitos se acercaron a nosotros. Antes de destruirlos conseguimos averiguar que ellos estaban bajo alguna especie de trance. Y que habían sido mordidos hacia tres días, por lo que esa era su primera vez, ni siquiera estamos seguros de si habían cazado antes. Por eso eran tan fuertes.- la mayoría quedo helado en su lugar ante tal respuesta.
-¿Quieres decir que Ben los hipnotizo y los lanzo contra nosotros? ¿Ni con un día de nacidos?- pregunto Carslie, que no podía creer lo que escuchaba.
-Si, pero no era el caso de todos. Algunos ya eran avanzados y parecían tener entrenamiento.- dijo Claire, y eso me hizo recordar al neófito que destruí antes de llegar a Forks. Parecía ya tener algunos buenos meses en esto.
-Estamos hablando de 20 neófitos. ¿Es algo que ya había echo con anterioridad esta garrapata?- pregunto Jake, serio y con sus manos en puños.
-No, nunca había lanzado tanta cantidad contra nosotras y eso lo hace aun mas extraño. ¿Qué se esta cocinando en su maldita cabeza?- pregunte mas para mi que para el resto.
-¿Tu no puedes ver nada al respecto?- pregunto Sam detrás de mi.
Yo suspire.
-No Sam. Cada vez que lo intento no veo nada o aparece algo totalmente distinto- Claire me miro sorprendida por un segundo.
-¿Pero que...?- no comprendía la reacción de Claire.
-¿Que sucede?- pregunto Bella. Ella era la mas nerviosa de todas. Después de Nessie que se aferraba al brazo de Jake.
-¿Porque nunca me contaste de esa llamada? Ella esta actuando realmente rara- me pregunto mi amiga.
-No quería preocuparte- Claire bufo.
-Puede que ella esté de su parte- murmuro.
-¿Que dices? Ashlye aun es humana. Ben se esconde detrás de ella para que no pueda verlo a él-
-¿Como estas tan segura? Ademas ella siempre me dio mala espina y tu lo sabes- Claire estaba que echaba chispas.
Bien sabía yo que Ashlye nunca fue de su agrado. Y ademas, con la ultima llamada de ella, había echo que yo también desconfiara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
MI BLOG SE ALIMENTA DE TUS COMENTARIOS
¡COMENTA PLEASE!