Para reflexionar...
Y así después de esperar tanto, un día como cualquier otro decidí triunfar. Decidí no esperar a las oportunidades sino yo mismo buscarlas. Decidí ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución. Decidí ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis. Decidí ver cada noche como un misterio a resolver. Decidí ver cada día como una nueva oportunidad de ser feliz. Aquel día descubrí que mi único rival no eran más que mis propias debilidades, y que en éstas, está la única y mejor forma de superarnos. Aquel día dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganar. Descubrí que no era yo el mejor y que quizás nunca lo fui, me dejó de importar quién ganara o perdiera. Ahora me importa simplemente saberme mejor que ayer. Aprendí que lo difícil no es llegar a la cima, sino dejar de subir. Aprendí que el mejor triunfo que puedo tener, es tener el derecho de llamar a alguien "Amigo". Descubrí que el amor es más que un simple estado de enamoramiento, "el amor es una filosofía de vida". Aquel día dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente. Aprendí que de nada sirve ser luz si no vas a iluminar el camino de los demás. Aquel día decidí cambiar tantas cosas. Aquel día aprendí que los sueños son solamente para hacerse realidad, desde aquel día ya no duermo para descansar. Ahora simplemente duermo para soñar.
jueves, 22 de septiembre de 2011
(30) ¿Verdad o Desafió?
-Bien, haremos un par de rondas mientras esperamos a que Nessie llegue. Supongo que todas sabéis las reglas ¿no?- decía Kim mientras hacia girar la botella en el centro de nuestra ronda.
Todas reímos ante su pregunta, era obvio que sabíamos jugar, ¿quien no?.
Solo consistía en hacer girar una botella, la parte inferior de esta señalaría a quien preguntara ¿Verdad o Desafió? y la tapa señalaría a quien respondiera a esa pregunta.
La botella comenzó a girar. Nos miramos entre sí, pensando a quien le tocaría.
Cuando termino el giro, suspire aliviada: Rachel le preguntaría a mi tía.
-Ok, Emily, elige: ¿Verdad o Desafió?- mi tía se lo pensó por un momento y al final su respuesta fue:
-Desafió- la cara de Rachel era de pura satisfacción.
Ella se paro y se dirigió a la heladera de donde saco un paquete con algo verde en su interior.
-Te reto a que te comas 10 aceitunas. Una atrás de la otra.- el rostro de mi tía se descompuso de inmediato. Ella odiaba las aceitunas, y todas lo sabíamos muy bien.
-¿Ya lo tenias planeado verdad?- le pregunto Emily mientras agarraba ese paquete y lo miraba como queriendo vomitar.
-Sí, solo necesitaba una oportunidad-
Mi tía abrió el paquete con mano temblorosa y nosotras tratábamos de contener la risa.
Aunque sentía un poco de compasión por ella, ya que yo también odiaba esas cosas verdes, pero esto era un juego, así que trate de verle el lado divertido.
Emily se metió una por una las aceitunas a la boca mientras hacia un sin fin de mucas de asco. Nadie contuvo la risa por mucho tiempo.
Al terminar la numero 10, salio como un volado hacia el baño. Creo que se cepillo los dientes 10 veces, un cepillado por cada aceituna que había comido.
-Ríanse mientras puedan. Ya llegara mi turno- nos decía mientras volvía a su lugar.
Kim hizo girar la botella de nuevo.
Esta apunto hacia Rachel, otra vez, pero ahora respondería a la pregunta de Kim. Emily sonrió pensando en que tal vez Rach recibiría su castigo.
-Muy bien Rachel, ¿Verdad o Desafió?-
-Bueno considerando la ultima ronda, creo que preferiría...Verdad- Emily, Kim y yo nos miramos al instante. Había una sola cosa que queríamos saber.
-Rachel, ¿estas segura?- le pregunto Kim.
-Oye ¿que haces? Ya a elegido... hazle la pregunta- le reproche.
No podía creer que iba a dejar pasar esta oportunidad.
-Sí estoy segura. No tengo nada que ocultar.- bueno, en eso, estaba totalmente equivocada.
Kim sonrió.
-Mi pregunta es...¿Quien a diseñado tu vestido de bodas?- miramos a Rach esperando su respuesta.
Ahora que lo pensaba, este juego podría haber sido una trampa para sacarle información sobre la boda, bueno específicamente sobre ese vestido.
Ella nos había dejado muy en claro que nadie sabría sobre el hasta el gran día, y nos había argumentado que era para que Paul no supiera nada sobre él, ya que seguiría la tradición y no dejaría que el novio viera el vestido.
-Esta bien, les diré, pero no me pidan nada mas y por favor no le digan a nadie, eh hecho mucho para guardad el secreto- todas asentimos al mismo tiempo. Rachel suspiro.
-Será Alice. Bella me mostró algunas fotos de su boda y me enamore de su vestido. Es obvio que no sera igual, claro. Le pedí a Alice que mantuviera todo en secreto ya que si alguno de los chicos llegaba a enterarse, Paul se enteraría tarde o temprano. Quiero que todo se a una sorpresa.- en el momento en que menciono a Bella, supe de inmediato que esa tal Alice era una Cullen.
Ignore olímpicamente ese detalle y me concentre en el juego.
Esta vez fue Emily quien hizo girar la botella, tal vez pensando en que pudiera tener algo de suerte y que llegara su venganza, pero no fue así.
Suspire. Sabia que tarde o temprano seria mi turno.
-Por fin. Pensé que no te tocaría jamas.- me dijo Rachel, pero ella no me preguntaría, y me sentí aliviada por eso, sino que sería la muy suertuda de Kim.
Ya estaba comenzando a pensar que había hechizado la botella para que ella se salvara del interrogatorio.
-Ya sabes la pregunta, así que elige.- me dijo Kim.
Yo me lo pensé seriamente.
Solo tenia dos opciones, y la que menos me gustaba era el Desafió.
No tenia ni idea de que locura tenia pensado para mi y no pensaba arriesgarme en averiguarlo.
elegir verdad me parecía la mejor opción, pero era muy probable que su pregunta tuviera algo que ver con mi pasado, y no quería recordar mucho de eso, aunque era inevitable hacerlo cuando uno de sus nuevos amigos estaba a días de atacar.
Pero aguantaría todo eso con tal de no enfrentarme al desafió de Kim.
-Elijo Verdad- ella se puso a pensar en una pregunta. Me di cuenta de que no esperaba que eligiera eso.
-Muy bien, tengo algo, pero recuerda que tendrás que contarnos toda la verdad.- al finalizar, en su rostro apareció una sonrisa.
Ese gesto me dio miedo, pero asentí.
-Quiero que nos cuentes que paso exactamente anoche. Estaban ustedes dos solos, creo que entiendes a lo que me refiero.- me ruborice en el acto. Jamas considere la idea de que pudiera preguntarme eso...
!JUSTO ESO¡
-!Kim¡ ¿Como puedes pensar así?- le reprocho mi tía.
Si supieras Emily dije para mis adentros.
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